miércoles, 25 de julio de 2012

Studia Heideggeriana, Vol. 1, 2011: Heidegger-Kant

El 5 de septiembre de 2008, en la ciudad de Buenos Aires, Bernardo Ainbinder, Francisco de Lara, Francisco Gómez y Alfredo Rocha de la Torre fundaron la Sociedad Iberoamericana de Estudios Heideggerianos, asumiendo la misión de "apoyar la investigación especializada acerca de la filosofía de Martin Heidegger en Iberoamérica, difundir los productos de dicha investigación y entablar contacto con las diversas asociaciones, sociedades y grupos dedicados a la obra del filósofo alemán en el ámbito mundial". Esta empresa fue inmediatamente alentada por Franco Volpi, filósofo italiano especializado en las obras de Heidegger y Schopenhauer, especialmente vinculado con la filosofía latinoamericana. Lamentablemente, Volpi murió unos meses después. La SIEH creó entonces un premio internacional con su nombre y le dedicó como homenaje el Congreso Internacional Martin Heidegger celebrado en Colombia del 6 al 9 de octubre de 2009. En el 2011, organizaron el primer congreso de la Sociedad en Chile. Otros filósofos miembros de la SIEH son: Alejandro Vigo, Arturo Leyte, Carlos B. Gutiérrez, Carlos Másmela, Felipe Martínez Marzoa, Ramón Rodríguez, Roberto Walton, Jorge Eduardo Rivera, Alberto Rosales y Ángel Xolocotzi. El Perú, que tuvo una importante influencia y alumnos directos de Heidegger como Alberto Wagner de Reyna, Víctor Li Carrillo y Federico Camino, no tiene aún representación en ella, evidentemente por la escasa participación de nuestros académicos en eventos y publicaciones especializadas.


La SIEH ha logrado publicar, con algunos meses de retraso, el primer volumen de su revista Studia Heideggeriana, que está dedicado a la relación de Heidegger con la filosofía de Kant. El contenido de este volumen es el siguiente:
  • "Introducción. De la filosofía trascendental a la ontología fundamental" por Bernardo Ainbinder.
  • "'La cosa más hermosa es que comienzo a amar realmente a Kant'. El lugar de Kant en la obra temprana de Heidegger" por Jesús Adrián Escudero.
  • "El neokantismo heideggeriano en las tensiones de la filosofía trascendental" por Andrés Crelier.
  • "Ser, percepción y presencia" por José M. García Gómez del Valle.
  • "Lenguaje, temporalidad y significado: de la Crítica de la razón pura a Ser y tiempo" por Daniel Leserre.
  • "El don de la intuición en la interpretación heideggeriana de Kant" por Susi Ferrarello.
  • "Heidegger e a ilusão transcendental" por Róbson Ramos dos Reis.
  • "Libertad como causa. Heidegger, Kant y el problema metafísico de la libertad" por Alejandro G. Vigo.
Studia Heideggeriana no ha podido tener un mejor comienzo que con la acertada decisión editorial de este primer volumen, con el que no se intenta establecer una probidad filológica por parte de Heidegger hacia Kant, sino medir el alcance del proyecto de la filosofía trascendental en el de la ontología fundamental y viceversa. Para ello se tiene en cuenta que Heidegger remite al filósofo de Königsberg no para explicarlo sino para aclarar su propia posición, con lo cual, no obstante, plantea desafíos para la filosofía trascendental a la vez que sugiere aproximaciones a Kant antes no desarrolladas, independientemente de si se comparte o no su particular apropiación. Ainbinder pone como ejemplo las referencias a Kant en el parágrafo 7 de Ser y tiempo. La primera de manera implícita, impugnando la concepción del fenómeno como mera apariencia (Erscheinung), tal como ocurre con Kant. La segunda, explícita más bien, en los siguientes términos:
En el horizonte de la problemática kantiana lo que se entiende fenomenológicamente por fenómeno puede ilustrarse mutatis mutandis– en la forma siguiente: lo que en los 'fenómenos', es decir en el fenómeno, entendido en sentido vulgar, ya siempre se muestra previa y concomitantemente, aunque no en forma temática, puede ser llevado a una mostración temática, y esto‐que‐así‐se‐muestra‐en‐sí‐mismo ('formas de la intuición') son los fenómenos de la fenomenología. Porque evidentemente espacio y tiempo tienen que poderse mostrar así, tienen que poder volverse fenómeno, si Kant pretende formular un enunciado trascendental fundado en las cosas mismas cuando dice que el espacio es el 'en dónde' a priori de un orden (SZ, p. 31).
El desafío fenomenológico para la filosofía kantiana, como se ve, es el de fundar en las cosas mismas los enunciados trascendentales. Eso hace posible volver con otra mirada a Kant, preguntándose, por ejemplo, por el rol de la estética trascendental (ese "en dónde", el Dasein como locus de toda donación) en la determinación kantiana de las categorías. Esta misma manera de abordar la relación de Heidegger con Kant puede ser orientadora respecto a otras de sus polémicas interpretaciones; sobre todo las de Heráclito, Parménides, Platón, Aristóteles, Leibniz, Hegel, Schelling y Nietzsche.

Ahora bien, los artículos aquí reunidos dan luces especialmente sobre la importancia de la filosofía kantiana para Heidegger, no sólo desde la publicación de Kant y el problema de la metafísica (1929), sino desde el tiempo en que redactaba Ser y tiempoEn su artículo inicial, Jesús Adrián Escudero recuerda que, en carta del 23 de agosto de 1925, Heidegger le escribe a Hannah Arendt: "Estoy a menudo en Königsberg: no sólo porque leo a Kant 'para reponerme' y, al hacer esto, me doy cada vez más cuenta de que aquello que hoy se impone con el nombre de filosofía se ha vuelto una miseria, incluso por estilo y por actitud". El mismo año le comenta a Karl Jaspers: "La cosa más hermosa es que comienzo a amar realmente a Kant". En 1927 escribe a Elisabeth Blochmann: "He vuelto a leer de un tirón la Crítica de la razón pura de Kant y he obtenido de esta admiración muchas enseñanzas, fortalecimientos y esclarecimientos". Y en carta del 12 de febrero de 1928 le dice otra vez a Jaspers: "Actualmente me estoy 'reponiendo' cotidianamente con Kant, que puede ser interpretado con un ímpetu todavía mayor que Aristóteles. Creo que tiene que ser redescubierto de manera completamente nueva". Escudero muestra incluso que su temprano alejamiento del catolicismo, luego que éste adoptara como sistema filosófico el antimodernismo de corte neotomista, está enmarcado en la relación con Kant a través de su maestro, el neokantiano Rickert, a quien le escribe en 1913: "Hasta la fecha no existe en toda la literatura de la 'filosofía católica' ni un solo libro, ni un solo ensayo en el que se ofrezca una comprensión aproximadamente correcta de Kant".

Kant acompañó a Heidegger durante toda su vida. Ya casi al final de la misma, en los conocidos seminarios de Zollikon, afirmaba a sus alumnos que "lo que he llamado ontología fundamental no es sino la filosofía trascendental".


Título: STUDIA HEIDEGGERIANA, VOL. 1, 2011: HEIDEGGER-KANT
Autor: BERNARDO AINBINDER (Editor)
Formato: 13 x 20 cms.
Páginas: 248
Editorial: Teseo; Sociedad Iberoamericana de Estudios Heideggerianos
Ciudad: Buenos Aires
Año: 2012
ISBN: 978-98-718-6724-0
ISSN: 2250-8740

Reseña editorial:
Este primer volumen de la serie Studia Heideggeriana reúne trabajos dedicados a los más diversos aspectos de la relación entre Heidegger y Kant, tomando en cuenta tanto la filosofía teórica como la filosofía práctica kantiana, la obra temprana de Heidegger y su recorrido a partir de los años ’30. La invitación a interrogar la relación Heidegger-Kant que motiva este libro no apunta a verificar la probidad filológica de la lectura heideggeriana (que, como es sabido, es cuanto menos dudosa) sino a comprender en qué medida la lectura de Heidegger permite iluminar aspectos no directamente tematizados por el propio Kant que son empero esenciales al proyecto de la filosofía trascendental y en qué medida, complementariamente, leer a Heidegger desde Kant permite echar luz sobre aspectos de la ontología fundamental problemáticos o no inmediatemente evidentes.


Página Web de la Editorial Teseo.

Página Web de la SIEH.

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